LOS FAVORITISMOS DE LOS PROGRAMAS FUTBOLÍSTICOS

En este último artículo vamos a hablar de la falta de objetividad en los programas deportivos relacionados con el fútbol. Es en el fútbol en el deporte en el que más se nota esta subjetividad de los presentadores y directores de los programas, ya que en otros deportes como el baloncesto también se da pero en menor medida.

Este tema ha llegado a un punto que hace unos días la prensa catalana culpaba a los medios de Madrid de estar detrás de una campaña para desestabilizar al F.C. Barcelona. A decir verdad no les faltan motivos para hacer tales acusaciones, ya que en las últimas semanas no han parado de salir rumores y declaraciones con poco fundamento (como por ejemplo una posible pelea entre Etoó y Ronaldinho), procedentes de la prensa y televisión madrileñas.

Para comprobar esta subjetividad deportiva solo hay que echar un vistazo a cualquier programa futbolístico o cómo ya comentamos una vez los propios espacios deportivos dentro de los telediarios.

Cadenas como Antena 3, Tele 5 y Cuatro tienen una visión claramente favorable hacia el Real Madrid. Llama la atención como Televisión Española con programas como El Rondo, se posiciona también entre las punteras en cuanto a subjetividad se refiere, con colaboradores en el programa claramente madridistas, que al ser mayor número que los barcelonistas quedan siempre por encima. Hay que decir que es vergonzoso que todo gire entorno al Real Madrid y el F.C. Barcelona, dejando en un segundo plano al resto de equipos (un ejemplo de esto que ha formado polémica, es la retransmisión por parte de Antena 3 de un solo partido del Valencia mientras que del Real Madrid y Barcelona han retransmitido cuatro, algo que molestó bastante a los valencianistas). Otra actitud inexplicable es la de Canal Sur que tiene un favoritismo hacia el Sevilla y el Betis que llega a lo exagerado, dejando totalmente de lado al resto de equipos de la comunidad andaluza.

La Sexta es quizá la cadena que ha sabido darle un toque neutral y objetivo a la hora de hablar sobre el fútbol.

En conclusión decir que hay una pequeña guerra entre los medios (madridistas por un lado y barcelonistas por el otro), que eclipsan al resto de equipos de una forma abrumadora. Cada uno defiende lo suyo e intenta agravar la crisis del otro dando de lado al resto. No estamos en absoluto de acuerdo con esto y aunque sean los dos equipos con más seguidores, historia, etcétera, pensamos que hay que tratar a los equipos de una manera más igualitaria.

EL GRITO DE PEPU HERNÁNDEZ

El pasado mes de septiembre el deporte español alcanzaba un nuevo logro histórico: la selección española de baloncesto se proclamaba Campeona del Mundo en Japón. Más de tres millones de personas siguieron a través de La Sexta las evoluciones de los “Golden Boys”. Un éxito con mayúsculas que alcanzó una gran repercusión mediática gracias, en parte, al despliegue técnico y a la publicidad que La Sexta dedicó al evento, haciendo una clara apuesta por el deporte de la canasta. Esta victoria, unida al seguimiento que reciben los españoles que juegan en la NBA, hacía presagiar un despegue definitivo del baloncesto en nuestro país.

Sin embargo, unos meses después, la situación sigue siendo preocupante. La Liga ACB, cantera de grandes jugadores y considerada la segunda más potente del mundo, apenas alcanza el medio millón de espectadores en cada una de sus transmisiones.

¿Cuáles son las razones que provocan este fracaso? TVE tiene las respuestas.

La cadena pública es la propietaria de los derechos de emisión del baloncesto de clubes, tanto de las competiciones nacionales (Liga ACB y Copa del Rey) como internacionales (Euroliga). Todos sabemos que una vez obtenida la materia prima hay que trabajarla para que ésta de sus frutos. Una labor que TVE no tiene demasiado clara.

Relegado a La 2 de Televisión Española, el baloncesto se emite los sábados por la tarde. No son, desde luego, el mejor día ni la mejor hora para captar espectadores, aunque con una buena promoción y publicidad se podría conseguir más público.
Otro aspecto inexistente en TVE. Su cobertura del baloncesto no tiene cabida en los informativos de la cadena, ya que ni aparecen resúmenes de la jornada ni tampoco informan de próximos partidos, limitándose a algún anuncio aislado.

Son habituales, además, las conexiones tardías (con el partido ya empezado) o el cambio de horario sin previo aviso. Especialmente grave fue la pasada final de la Euroliga (9 de mayo), en la que la transmisión comenzó media hora tarde, un hecho que ha provocado una oleada de protestas.

Por último, señalar también que esta competición, el equivalente a la Liga de Campeones de fútbol, se encuentra desterrada en el canal temático Teledeporte, a horarios intempestivos entre semana y de cuya promoción preferimos no hablar. Comparen ustedes el tratamiento de Antena 3 y el de TVE a sus respectivos productos y se llevarán las manos a la cabeza.

Algunos pensaréis, con razón, que es la única cadena que apuesta estos días por este deporte. Cierto pero, como hemos visto anteriormente, otras cadenas también lo han hecho en acontecimientos puntuales y con resultados bastante diferentes a los actuales,
Pepu Hernández, seleccionador nacional y principal artífice de un éxito que esperamos no caiga en el olvido, hizo el mejor resumen. Solo necesitó una palabra. Un grito ya inolvidable. ¡ BALONCESTO ¡

HINCHAS EN LOS DEPORTES

El deporte, hoy en día, no es sólo un mero entretenimiento entre amigos para pasar el rato y ponerse un poco en forma, que también puede serlo; sino que ha llegado a un punto en el que detrás existe una infraestructura con cimientos bien fijados, pues han ido adquiriendo un nivel de profesionalidad que requiere una buena base en todos los aspectos: federaciones, clubs, deportistas y técnicos profesionales, contratos con marcas, derechos de imagen, ayudas de los ayuntamientos, fuerzas del Estado, y como no, los aficionados, ya que sin ellos no valdría para nada todo este trama de relaciones.

Esta semana nos centramos en el factor social, en esas personas que hacen posible que el deporte obtenga apoyo y seguimiento, y con ello que se mantenga y tenga vida. Pero cuando este apoyo es masivo se convierte en un gran negocio, en el que mucha gente quiere sacar tajada.

Existen deportes minoritarios como el golf, la hípica u otros que manejan grandes cantidades de dinero, pero no de masas de personas. Sin embargo, deportes como el fútbol o el baloncesto, además de mover mucho dinero, mueven a mucha gente. Es aquí donde aparecen los hinchas, fieles seguidores de sus equipos, que sienten los colores como si les fuera la vida en ello, pues les hace pasar momentos muy intensos. Para ciertas personas esto puede llegar a ser un modo de vida, ya que condiciona su forma de vivir por la de su equipo. Saben cada movimiento de su club y lo siguen durante toda la semana, en todos los medios disponibles, tv, prensa, radio, Internet. Todos los deportes y clubs tienen páginas web oficiales y no oficiales, así como sus seguidores (superhinchas).

Cierto es que los “grandes deportes” tienen una amplia y diaria cobertura, como ya se comentó con anterioridad en el blog, con lo que estos seguidores lo tienen bastante fácil para estar al día de sus equipos.

Convendría aclarar que existen los seguidores de un equipo o deportista, meros aficionados que disfrutan del espectáculo;y los hinchas, seguidores fanáticos que apoyan a sus equipos con cánticos y coloridos, y entre los cuales siempre existen cabecillas, que expolian a las masas, y que fundamentalmente se aprovechan de estos grupos como arma para otras intensiones. En Europa suele haber detrás un apoyo político extremista, ya sea de izquierdas o de derechas, con diversos nombres según el lugar:en España son los ultra, en Italia los tifosi, en Inglaterra los hooligan. Mientras en Latinoamérica son conocidos como barras bravas, y no suelen seguir ideales políticos. Se producen enfrentamientos radicales entre tales grupos, con las fuerzas del orden, e incluso con las instalaciones o sus alrededores. El fútbol es el deporte donde se encuentran más altercados. Hay gente que se aprovecha de estas denominaciones, y existen incluso marcas de ropa como “hooligan” donde venden sudaderas con gorros, típicas de los ultras que van provocando altercados.

Desde luego que no todos los aficionados son radicales ni buscan problemas, se trata de una minoría, pero una minoría bien organizada e incluso con apoyo por parte de algunos clubs, como pasa aquí en España el fútbol. No es fácil erradicarlo pero parece ser que a los propios clubs les interesa mantenerlas.

Violencia-Morbo-Audiencia

Hay gran variedad de deportes, unos nada violentos, otros violentos de por sí y otros de contacto en los que se puede llegar a ser violentos. Como hablamos de medios de comunicación y sobre todo de televisión hay que destacar los deportes de mayor audiencia: fútbol, baloncesto o tenis, entre otros.

La postura adoptada por los medios de comunicación respecto a la violencia en el deporte está, por supuesto en contra. Está claro, una cadena de televisión no va a admitir que está a favor de la violencia o que les gusta que en los partidos de fútbol se tiren objetos que pueden hacer daño a los futbolistas, sería echarse tierra sobre su propio tejado. A pesar de ello y aunque estén en contra, le sacan buen rendimiento a todo tipo de violencia que transcurre en un acto deportivo. Por ejemplo, el hockey es un deporte que en España no llama mucho la atención, y de hecho es raro o casi imposible ver en las noticias deportivas algún gol o alguna buena jugada de hockey. Sin embargo, cuando en uno de éstos partidos hay una pelea (y según las reglas de este deporte no pueden ir a separarlos hasta que caigan al suelo) esas imágenes de la pelea sí las retransmiten. De donde podemos sacar en claro que la violencia da morbo, y que el morbo da audiencia, único objetivo de estas cadenas. No les interesa el hockey, les interesa la pelea. Como este ejemplo se podrían buscar otros muchos más y llegaríamos a la misma conclusión.

Los medios de comunicación son una fuerte arma de adoctrinamiento, sobre todo el fútbol tiene muchísima audiencia, y si dos jugadores se pelean en un partido tienen que saber que esas imágenes se van a repetir hasta la saciedad y que hay niños que van a ver esas imágenes y ellos como futbolistas profesionales son ejemplo para muchos niños. Por supuesto la televisión emitirá las imágenes de la pelea para conseguir audiencia pero para ver la postura de la cadena el presentador dirá “Un espectáculo vergonzoso” o “Niños esto no lo hagáis en casa”. Pero la audiencia ya está ganada.

Para finalizar, habría que decir a favor de las televisiones, que gracias a ellos todo el mundo se enteró en su día del castigo que recibió un aficionado del “Betis” por lanzar una botella a la cabeza del entrenador del Sevilla. Puede que la próxima vez que se le ocurra a alguien hacer algo parecido recuerde ese castigo. En conclusión, violencia-morbo-audiencia.